Cómo preparar tu temporada ciclista para disfrutarla al máximo
La llegada de la primavera y sus condiciones más benignas se convierte para muchos en el “empujón” y punto de partida del inicio de temporada ciclista.
Iniciar la temporada no es solo cuestión de ganas y tiempo. Por eso, desde 360-Cycling (Para más información visita aquí la web de 360 Cycling) y Mussara, os proponemos una serie de pasos a seguir para que “lo que bien empieza, bien acabe” con vuestra nueva temporada de ciclismo. Ha llegado el momento de ir optimizando o simplemente consolidando hábitos. Hacer un repaso de todos ellos con autocritica y rigurosidad nos ayudará disfrutar más de nuestro deporte y evitar situaciones negativas.
Como puntos más importantes, destacaríamos:
1. Marcar unos objetivos: “Motivadores y realistas”.
Un objetivo dotará de un sentido global y evaluable a nuestro desempeño diario sin que aparezca la sensación de estar “perdido/a”. No hay sin embargo que olvidar la necesidad de disfrutar de cada uno de los días en sí mismos. Buscaremos objetivos reales, basados en nuestra experiencia de temporadas anteriores y en el asesoramiento de nuestro entrenador.
Os animamos, además, a ser capaz de establecer objetivos paralelos, no solamente basados en el rendimiento sino en experiencias que nos aporten un “extra”. Un ejemplo para muchos podría ser buscar ese recorrido espectacular de una gran marcha cicloturista, subir un puerto de una etapa del Tour, entrenar más con viejos amigos o simplemente conocer lugares nuevos donde pedalear, etc.
2. Revisa tu material: “No solo la bicicleta es importante”.
A nadie se le escapa la necesidad de hacer un chequeo a fondo de nuestra bicicleta y sus accesorios y vestimenta. Hay que cambiar todos aquellos elementos de desgaste que lo necesiten con especial atención a los que comprometen nuestra seguridad (frenos, cubiertas, calas de zapatillas, casco, etc) y manteniendo con buena limpieza y engrase los elementos de rodamiento y fricción.
En este apartado es también imprescindible mencionar la vestimenta adecuada, pues además del confort en fit y termorregulación, nos evitará rozaduras y otros problemas dérmicos.
El control y cambio de calas desgastadas y pequeños reajustes en la biomecánica pueden ser en muchos casos un aliado clave para evitar que aparezcan las típicas lesiones por sobrecarga a los 2-3 meses de entrenamiento. Y es que esos desajustes suelen subyacer sin darnos cuenta, y se manifiestan en forma de sobrecarga o lesión cuando el nivel de intensidad o de carga llega a un punto más exigente a lo largo de los meses.
3. Registra tus progresos: “No ahogarse con los datos”.
Hoy en día disponemos de multitud de dispositivos en la bicicleta y variables que nos aportan multitud de datos y valores biométricos a tener en cuenta en el entrenamiento. Es necesario un buen asesoramiento profesional por un lado para entenderlos correctamente y por otro lado para darle la importancia adecuada en cada momento y en cada caso particular.
4. Controla tu entrenamiento: “Los principios de entrenamiento no son solo teoría”.
No es cuestión de hacer un repaso a toda la teoría de entrenamiento, pero si recordar que los diferentes procesos y reglas que se establecen en la mejora de nuestro rendimiento están más que estudiados y que constituyen una ciencia. En este inicio de temporada destacaríamos:
· Principio de Individualización. Que viene a decir que cada uno de nosotros somos únicos y diferentes. Los test de laboratorio o campo nos ayudarán a conocer nuestra situación real y actual, personalizando al máximo por ejemplo las cargas iniciales de un buen programa de entrenamiento.
· Principios de continuidad y progresión. Es un dos en uno, ya lo decía el refrán “sin prisa, pero sin pausa”. No tenemos que estar intentando batir nuestras marcas desde la primera semana, todo es un proceso de crecimiento progresivo y aunque nos de “coraje” haber perdido algo de forma respecto a la temporada pasada, es un proceso normal que debemos de asumir y entender. El crecimiento interanual basado en una buena continuidad y progresividad de las cargas serán básicas para nuestro desarrollo y evitar a su vez lesiones o sobreentrenamientos antes de los objetivos.
· Principio de relación carga-recuperación. Ahora más que nunca esta relación óptima entre la carga de entrenamiento y la recuperación es muy importante.
Depende mucho del nivel deportivo y del punto de partida, pero iniciaremos la temporada asegurando la recuperación entre entrenamientos y facilitando todos los procesos de adaptación.
5. Potencia tu alimentación: “No todo es lo que parece”
Constituye uno de los aspectos decisivos en los deportes de resistencia a cualquier nivel de rendimiento, no solo por cuestiones de peso o composición corporal, sino como control de los diferentes sustratos energéticos y su eficiencia en cada momento. Un buen control de la alimentación en el deporte no consiste solamente en tener claras unas pautas de alimentación antes, durante o después de los entrenamientos, sino en ir adquiriendo una serie de hábitos que nos garanticen un rendimiento-salud óptimo a largo plazo, teniendo en cuenta las características individuales de cada uno. Ahora es buen momento para ponerse en manos de profesionales que evalúen nuestro estado nutricional, carencias y necesidades y podamos con tiempo ir elaborando una buena estrategia de trabajo a largo plazo conjuntamente con los entrenamientos que vamos a realizar.
6. Tonifica todo tu cuerpo: “No solo de piernas vive el ciclista”
Como todos sabréis, los trabajos de fuerza y tonificación general ya son una realidad necesaria para muchos ciclistas y cicloturistas. Pero, en muchas ocasiones, la falta de tiempo o la pereza nos hacen olvidarnos o dejarlos en un segundo plano. Adapta este trabajo a momentos concretos donde puedan ser un hábito para ti y en cualquier caso no necesiten mucho material o tiempo para ejecutarlos. Con poco lo notarás mucho.
7. Organiza tu semana: “7 días dan para mucho”
Lo hemos incluido como último punto, pero podría ser igualmente el primero. Una buena organización de las rutinas de trabajo, comidas, sueño y tiempo libre nos pueden aportar no solo un extra de tiempo para entrenar sino una buena forma de conciliar la vida laboral, familiar y deportiva. Cuando esas relaciones se ajustan bien y en su justa medida todo es más fácil y los objetivos más alcanzables.
¡Mucho ánimo y fuerza en vuestras salidas!