Hidratación en invierno: ¿realmente necesitamos menos agua?

• Aunque el frío reduce la sensación de sed, nuestro cuerpo sigue necesitando una hidratación adecuada para rendir al máximo y evitar problemas de salud. 

13.02.2025. La hidratación es un aspecto esencial en el ciclismo, independientemente de la estación del año. Aunque en invierno las bajas temperaturas pueden reducir la sensación de sed, el cuerpo continúa perdiendo líquidos y sales minerales que deben ser repuestos para mantener un rendimiento óptimo y prevenir problemas de salud. 

¿Se necesita menos agua en invierno? 

Es un error común pensar que, debido al frío, el cuerpo requiere menos hidratación. Aunque se sude menos, el organismo sigue perdiendo líquidos a través de la respiración y la orina. Además, el aire frío y seco puede aumentar la pérdida de humedad al respirar. Por lo tanto, la necesidad de hidratación persiste, y no debe ser subestimada. 

Consejos para una hidratación adecuada en invierno: 

Planificación de la hidratación: Es fundamental establecer un plan de hidratación antes de salir a rodar. No esperes a sentir sed para beber; en climas fríos, la sensación de sed puede disminuir, pero el cuerpo sigue necesitando líquidos. Establece recordatorios para beber a intervalos regulares durante tu ruta. 

Uso de electrolitos: Incorporar bebidas con electrolitos ayuda a reponer las sales minerales perdidas y mejora la absorción de líquidos. Esto es especialmente importante en sesiones prolongadas o de alta intensidad. 

Bebidas calientes: Consumir bebidas calientes no solo ayuda a mantener la temperatura corporal, sino que también facilita la ingesta de líquidos en climas fríos. 

Alimentación e hidratación combinadas: Consumir alimentos con alto contenido de agua, como frutas, puede contribuir a la hidratación. Además, una nutrición adecuada ayuda a mantener los niveles de energía durante el ejercicio en climas fríos. 

Atención a las condiciones climáticas: El frío extremo puede aumentar la pérdida de líquidos. Asegúrate de estar bien abrigado y protegido contra el viento para reducir la deshidratación causada por la exposición al frío. 

En resumen, aunque las condiciones invernales pueden disminuir la sensación de sed, es crucial mantener una hidratación adecuada para asegurar un rendimiento óptimo y prevenir la deshidratación. Planifica tu ingesta de líquidos, utiliza bebidas calientes y presta atención a las señales de tu cuerpo para mantenerte hidratado durante tus salidas en bicicleta en invierno.